Indique brevemente la naturaleza de la consulta
Lo ideal es formular la consulta en el asunto. Por ejemplo, una oferta de cooperación o de compra de un producto. Al principio del correo electrónico, duplique la solicitud a la que se dirige en una o dos frases. No hay que dejarse llevar enumerando todas las ventajas. Es mejor añadir la disposición a discutir en detalle todos los servicios o adjuntarlos en un archivo o enlace aparte, para que la carta no parezca sobrecargada. Deja sólo lo más importante.
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Establezca una conexión emocional
Para que tu carta destaque entre cientos de otras, es importante que el destinatario conozca tus motivaciones. Cuando solicites un empleo o una colaboración, habla de tus experiencias positivas con la empresa. Por ejemplo: «Suelo comprar cosas en vuestra tienda online, ya que me gusta la calidad de los tejidos, el diseño y la rapidez de entrega, y además tenéis un gran sistema de bonificaciones para los clientes fieles». Y lo que es más importante, no intentes presionar a una persona utilizando manipulaciones como «¿Ya estás interesado?» o «¿Alguno de los temas te gusta?».